La verdad es que en la ciudad de Sevilla del Siglo de Oro, según Ángel González Palencia, se retrata al pícaro (en la actualidad mangante) de esta manera: "...es producto del orgullo nacional, en una clase de gentes no habituadas al trabajo, y que viven de estos servicios,...Literalmente es el pícaro, hombre que, sin ser verdaderamente criminal, pertenece al hampa; tiene pocos o ningunos escrúpulos, particularmente en proporcionarse medios de mantenimiento; es humano, buen creyente, aunque pecador (y no de la praderalll); no está habituado al trabajo regular y constante, sino que es perezoso y holgazán; su ocupación normal es la de servir a otro; hurta pero no roba, es astuto, ingenioso e imprevisor y simpático".
Este mangante afloraba en la Sevilla que fue "la capital del imperio de ultramar", no olvidemos que de esta insigne ciudad salían las flotas hacia el Nuevo Mundo, y por supuesto, cuando los corsarios nos lo permitían, arrivaban a ella los galeones cargados con los cargamentos de oro y otras riquezas.... Como decía, en esta ciudad que Cervantes conoció tan bien, y que retrató perfectamente en su obra Rinconete y Cortadillo, se nos ha quedado enquistada esta pequeña escoria, que está orgullosa de engañarnos día a día en nuestros negocios. Tómese como ejemplo la típica bulla...
" Niño yo te he dado un billete de 20 euros..."
"Perdone (porque hay que ser educado a pesar de ver como te la quiere meter "doblá") señora, han sido sólo 10 euros.."
"No perdona niño, pero sólo tenía un billete de 20, porque es lo que me acaba de dar el cajero"
"!No señora! (esta vez hay que ser un poquito más contundente en el tono), usted me ha dado sólo 10...
Mientras el "tendío" se va llenando de clientes que te miran pero que ninguno, a pesar de haber visto la jugada, te dan la razón....tan sólo te alargan la mano para que cojas su ticket de subscriptor y marcharse para escurrir el bulto....Tu temperatura empieza a subir....el sudor resbala por tu piel, tragas saliva....y de repente.....( iba a decir:..." suena el despertador y te despiertas para ir al kiosco")...miras tu mano izquierda y te das cuenta de lo que aprendiste la primera vez que te la dieron.. (mira Rafa, cuando des el cambio dálo con la mano derecha y deja el billete que te han dado en la mano izquierda, así es mas difícil que te equivoques) y dices pausadamente:
"Señora , el billete que usted me ha dado era de 10 puesto que todavía lo tengo aquí. La miro tranquílamente, y procuro no aparentar que me estoy acordando de toda su familia, como si pasara toda ella en procesión y no faltase ni el apuntador.
Este caso novelado, es con lo que tenemos que lidiar todos los dias, yo os propongo que contemos nuestros "casos más sonados" porque de todos ellos podemos sacar una experiencia que nos ayudará en el futuro, porque no nos engañemos, el que me la viene a dar a mi hoy te la dará mañana a tí, ya hemos visto que Sevilla tiene una larga tradición en el tiempo del tema...y no os engañéis al más listo de nosotros nos la cuelan, y sino al tiempo. Por eso creo que es bueno poner: el objeto del timo, la descripción del timador y los datos que creamos relevantes
Este mangante afloraba en la Sevilla que fue "la capital del imperio de ultramar", no olvidemos que de esta insigne ciudad salían las flotas hacia el Nuevo Mundo, y por supuesto, cuando los corsarios nos lo permitían, arrivaban a ella los galeones cargados con los cargamentos de oro y otras riquezas.... Como decía, en esta ciudad que Cervantes conoció tan bien, y que retrató perfectamente en su obra Rinconete y Cortadillo, se nos ha quedado enquistada esta pequeña escoria, que está orgullosa de engañarnos día a día en nuestros negocios. Tómese como ejemplo la típica bulla...
" Niño yo te he dado un billete de 20 euros..."
"Perdone (porque hay que ser educado a pesar de ver como te la quiere meter "doblá") señora, han sido sólo 10 euros.."
"No perdona niño, pero sólo tenía un billete de 20, porque es lo que me acaba de dar el cajero"
"!No señora! (esta vez hay que ser un poquito más contundente en el tono), usted me ha dado sólo 10...
Mientras el "tendío" se va llenando de clientes que te miran pero que ninguno, a pesar de haber visto la jugada, te dan la razón....tan sólo te alargan la mano para que cojas su ticket de subscriptor y marcharse para escurrir el bulto....Tu temperatura empieza a subir....el sudor resbala por tu piel, tragas saliva....y de repente.....( iba a decir:..." suena el despertador y te despiertas para ir al kiosco")...miras tu mano izquierda y te das cuenta de lo que aprendiste la primera vez que te la dieron.. (mira Rafa, cuando des el cambio dálo con la mano derecha y deja el billete que te han dado en la mano izquierda, así es mas difícil que te equivoques) y dices pausadamente:
"Señora , el billete que usted me ha dado era de 10 puesto que todavía lo tengo aquí. La miro tranquílamente, y procuro no aparentar que me estoy acordando de toda su familia, como si pasara toda ella en procesión y no faltase ni el apuntador.
Este caso novelado, es con lo que tenemos que lidiar todos los dias, yo os propongo que contemos nuestros "casos más sonados" porque de todos ellos podemos sacar una experiencia que nos ayudará en el futuro, porque no nos engañemos, el que me la viene a dar a mi hoy te la dará mañana a tí, ya hemos visto que Sevilla tiene una larga tradición en el tiempo del tema...y no os engañéis al más listo de nosotros nos la cuelan, y sino al tiempo. Por eso creo que es bueno poner: el objeto del timo, la descripción del timador y los datos que creamos relevantes
2 comentarios:
Me coincidío con un día que andaba yo chungo cuando me llegó un tipo, con un paquete de Winston en la mano y la vuelta hasta cinco euros y diciéndome que le faltaban cinco hasta diez. Yo no estaba muy seguro de que lo que decía el tipo era cierto, pero como tampoco andaba yo muy centrao... pues se lo di.
Días más tardes, volvió el tipo con la misma jugarreta, pero a parte de estar yo es mis cabales, tuvo mala suerte el chaval.
-Mira que he estado aquí antes, me he llevado un paquete de Winston y te he dado 10 euros, y me has dado la vuelta de cinco.
-No, tú no has estado aquí.
-Que sí hombre, no te acuerdas, que lo he cogido de la maquina.
-En este quiosco, no.
-¡¡Cómo que no!!
-Pues mira, primero si ha sido aquí, tendrías que habermelo reclamado al momento,cosa que no has hecho, y es imposible que te hubiera dado winston, porque desde ayer por la tarde estoy sin él, y hasta que al mediodí le llegue al del estanco, no lo voy a tener.
-Pues yo me lo he llevado de aquí.
-Yo no te voy a dar el dinero.
-Voy a buscar a la policía eh?
-Corre!
Hasta hoy. Alerté a mi amigo del estanco, porque desde mi ventanita, veía que se dirigía allí. Hasta que encontrase alguna víctima.
A mi tamién me la intentaron meter con el mismo rollo:
¿Está es la vuelta de un Chester, es que te dí 20 euros y solo me has dado 4 de vuelta?
Yo respondí:Perdona no se que me estas diciendo...Seguramente...me equivocaría antes...toma el resto...(yo me quedo con mis dudas y con la cara del tio).
Al mes me encuentro con el mismo "pescaó", el problema para él es que me suelo quedar con las caras de estos "besugos"...La conversación esta vez empezó iqual pero el resultado no acabó como quería el "pescailla".
A este tipo de engaño a los que hemos sido sometido tanto Ruben como yo lo podriamos llamar: EL TIMO DE LAS VUELTAS...
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