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sábado, 12 de junio de 2010

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La Vida, el Trabajo, LA FAMILIA


En estos días tengo muchas preguntas sin resolver, veo que me preocupo de infinidad de cosas y casi todas se basan en el trabajo y el dinero, siempre dejo para el final lo más importante: La FAMILIA, veo que el tiempo pasa, y se te escapa LA VIDA fijandote en esas preocupaciones y todo pasa, y tan solo perduran nuestras acciones, cuando dejemos este mundo continuarán los libros que tenemos sin leer en las estanterías, la música que no escuchamos...
Hace unos años fui testigo del desahucio de una persona por impago del inmueble en el que vivía, no abría la puerta, cuando la abrieron se dieron cuenta del porque no atendía a las llamadas o por que no salia a comprar el pan del día, estaba colgado de la lampara del comedor.
Como no tenía familia, el propietario del inmueble, contrató una cuba de obra, y a dos operarios, desde los vasos , hasta los calcetines aparecieron tirados al día siguiente, televisor, lamparas, camisas, etc, toda la vida de ese hombre estaba materialmente en la basura, lo que más me desagradó fue ver los curiosos llevándose cosas de los escombros, fotos, marcos...yo me pregunto: ¿para eso estamos aquí?, ¿que perdura de nosotros?. !Pues nuestras obras, ya sean en la familia o en los que nos conocen!.
Yo me preocupo en estos momentos de los problemas económicos ¿no podemos solucionarlos?, estoy harto de problemas de facturación, de cargos indevidos, de rebajes en las mercancías no reflejados, de problemas de tecleo, una empresa decide unilateralmente que devuelvo las cosas mal y me cobran los errores, algunos se producen, otros no se entienden y se intentan buscar soluciones ¿se aplican las mismas?, yo lo digo hoy: !estoy harto!.
A partir de hoy si no atienden a razones ni dan soluciones tomaré medidas drásticas, lo primero, disfrutaré cada segundo de mi familia, me acostaré dando gracias por el día que he vivido, me levantaré por las mañanas dando gracias a Dios por el día nuevo que me regala con los amaneceres que disfruto, cada bocanada de aire la degustaré como si fuera la última, intentaré descubrir los milagros que ocurren a mi alrededor, en las pequeñas cosas descubriré universos, mi preocupación será disfrutar de todo lo que me rodea, no pienso preocuparme por ni una sola factura mal cobrada más, tan solo me limitaré a lo más práctico: " error cometido en factura por la distribuidora, error no abonado "(lo que yo me equivoque por supuesto que lo voy a pagar), los errores que cometan los distribuidores no van ser pagados y después esperar a que me devuelvan mi dinero... ya no me quitan un segundo de mi tiempo ni de mi salud ni mi dinero ni el de mi FAMILIA.
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1 comentarios:

Anónimo dijo...

Ciertamente este negocio es un devorador de tiempo. Tiempo robado a nuestras familias y a nuestro ocio. Todos los días igual: recepción de mercancía, comprobación de albarán y al final de la jornada prepareación de la devolución. Todos los días igual, no hay otro negocio como este. Por ejemplo la papelería; cuando hago un pedido me puedo pasar una tarde desembalando y comprobando mercancía y su correspondiente factura, pero hasta dentro de un mes o más no vuelvo a hacer un pedido. Con la prensa esta tarea es diaria, al recibir y al devolver, y sus c orrespondientes facturas semanales, no te digo.
un saludo, Mariano

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